Maria Mc Cluskey
Comision 07
Profesor: Santiago Castellano
Consigna: Escribir un cuento, que incluya: 1 objeto con un jeroglífico, 1 perro negro, 1 objeto filoso, 1 enano, 1 reloj antiguo, 1 espejo roto y que el Narrador o Narradora sea interno, en 1° persona.
Trabajo individual
Primera escritura
El ojo de Horus
Estoy acostado en mi cama esperando, como todas las noches, a que mi padre venga a contarme un cuento. Sus cuentos son los mejores que he escuchado. Tiene una forma tan increíble de contar cada una de ellos, como si realmente los hubiese vivido. Todos los dias espero a que llegue este momento, es mi favorito. Mientras lo espero, me imagino de qué se tratará la historia de esta noche. Últimamente mi padre anda muy cansado. Sus historias son breves y un poco aburridas la verdad, pero esta noche me prometió contarme la mejor de sus historias. él mismo dice que me la quiere contar hace mucho, hoy es la noche indicada.
Finalmente llega, agarra la silla y la aproxima a mi cama. Me abraza, no entiendo porque, pero lo abrazo igual. Me abraza muy fuerte y luego parece secarse los ojos.
"Habia una vez, un niño muy curioso, llamado Gilbert. Un niño que le encantaba adentrarse en todo tipo de aventuras. La curiosidad lo guiaba en cada camino. Le gustaba aprender. Amaba salir al exterior y perderse en el inmenso bosque que lo rodeaba, porque siempre de alguna manera, con alguna ayudita mágica, encontraba su camino a casa."
Mientras mi padre me contaba el cuento, yo cerraba los ojos, porque él siempre me decía que al cerrar los ojos, la historia cobraba realidad. Lo unico que tenia que hacer era guiarme por su voz.
"Esa mañana, Gilbert salió de su casa en busca de una nueva aventura. Sabía en su interior, que algo fantástico sucedería. Llevó consigo un par de manzanas y un poco de agua para el camino. Sabía que iba a ser una jornada larga. Debía estar preparado. Decidió, como siempre, dejarse llevar por su curiosidad. Siempre su curiosidad lo llevaba a aventuras inimaginables. Caminando en el medio del bosque, un poco perdido, se encontró con una sucesión de pequeñas piedras. Decidió seguir ese camino. Lo llevaron a encontrarse con una pequeña puerta de piedra. Como si fuese diseñada exactamente a su altura. Confiado, la abrió y entró. Era un lugar distinto, que nunca antes había conocido. Él no se sentía chiquito como en su mundo, al contrario todos eran de su tamaño. Gilbert sonrió."
Abrí los ojos y miré a mi padre y le pregunté: "¿Que lugar descubrió Gilbert papá? "
"El escondite de los enanos", me dijo.
Volví a cerrar los ojos, fascinado imaginándome cómo sería ese lugar.
"Gilbert ve asombrado a pequeños hombrecitos, todos trabajando duro sobre piedras. Era un lugar con mucha paz y todo sumamente ordenando. Uno de ellos se le acerca y le comienza a hablar. Al principio no entiende nada de lo que le dice este hombrecito, pero decide seguirlo. Poco a poco comienza a comprenderlo, como por arte de magia. El hombre le muestra el lugar. Todos eran muy amables y le daban la bienvenida. Gilbert se sorprende a ver que un hombrecito está haciendo un dibujo en una piedra. Alucinado por como lo hace, se detiene a observar. Le pregunta de qué se trata el dibujo. El hombrecito le responde que es un símbolo, el ojo de Horus, Udyat."
Siento reconocer ese simbolo, como si ya lo conociera. Poco a poco escucho más lejana la voz de mi padre, hasta que de repente me encuentro en un gran silencio. Abro los ojos y allí estaba, rodeado de enanos trabajando.
Salgo por la puerta de piedra. Al cerrarla, siento un ruido aterrador, como si fuese de alguna bestia. Me doy vuelta sigilosamente. Al darme vuelta me sorprendo al descubrir frente a mi, un perro negro, mirandome fijamente. Senti miedo, pero al mirarlo a los ojos, se me fue. Su mirada me resultaba familiar, como si ya la hubiese visto antes. Me surge la idea de darle una de mis manzanas. Se la doy y de pronto ya lo tenia a mi lado muy amigable y dejándome acariciarlo. Tenía un collar extraño, fuera de lo común. En su collar tenía un reloj, que no funcionaba, pero marcaba las 4:15.
Tengo el instinto de que el perro me quiere mostrar algo. Lo sigo. De pronto me encuentro frente a una casa, mi casa. Entramos, todo estaba oscuro, pero me guio por el perro. De pronto me encuentro en la habitación de mis padres. El perro se dirige hacia el espejo. Estaba roto. Allí veo el reflejo de un hombre y no del perro. Tuve una sensación extraña. El hombre me sonríe.
Me despierta mi madre. Me abunda un sentimiento amargo. La veo y sé que algo anda mal. Está llorando.
Semanas después de la muerte de mi padre, vuelvo a sentir esa sensación extraña, la misma que la noche en que mi padre murió. Decido ayudar a mi madre a preparar la comida. Me pide que corte las verduras. Del cajon, saco un cuchillo. Corto las verduras y en eso reconozco en en el mango aquel símbolo que el enano había tallado. Un ojo. Inmediatamente voy a la biblioteca de mi padre y busco el significado del símbolo en un libro de jeroglíficos egipcios. Lo encuentro, es el ojo de Horus, simbolo de proteccion.
En ese preciso instante todo cobra sentido, mi sueño cobra sentido. Ese reloj era de mi padre.
Desde ese dia, conservo conmigo ese cuchillo, porque en cierto modo siento que él siempre me va a acompañar y proteger, a donde quiera que vaya.
*Perro negro= símbolo de el augurio de la muerte
* Ojo de Horus= símbolo de protección, de salud, de prosperidad.
