María
Mc Cluskey
Comisión
07
Profesor:
Santiago Castellano
Autobiografia
Trabajo
Individual
Primera
escritura
Entre dos mundos
¿Alguna
vez sintieron amar por igual dos cosas al mismo tiempo? Yo lo siento
constantemente, como si no hubiese manera de elegir una sobre la otra. Yo creo
que mi vida se divide un poco en dos.
Mi
mundo se dividió cuando supe que mis padres se separaban. No tengo muchos
recuerdos de ellos juntos, ni tampoco de cómo fue exactamente el momento en que
se separaron. Pero recuerdo haber llorado mucho, como si se me terminara el
mundo para mí. Lo que no sabía, es que algo nuevo se acercaba y era más
grandioso aún. Unas de las cosas que valoro hoy, con mis 18 años de edad, es
que pude disfrutarlos a cada uno por separado y lo sigo haciendo. El hecho de
verlos por separado me dio la posibilidad de conectarme más y de construir con
cada uno la relación tan especial que hoy en día mantengo. A partir de la separación,
mi vida era estar una semana viviendo en cada casa. Si, era bastante movimiento
para una niña de 6 años, pero pude acomodarme. Estar moviéndome entre dos lugares
es algo que me caracterizó, porque si hago un panorama sobre mí, siempre estuve
en el medio de dos lugares, dos pasiones, dos personas.
Desde
que tengo memoria, recuerdo siempre viajar en vacaciones a Necochea, ciudad
donde vivió y creció mi madre, y donde actualmente vive mi abuela y toda mi
familia de parte materna. Necochea para mí, refleja una pausa a la vida
alborotada que suele ser Buenos Aires capital. En su inmensa playa y su mar
frío me he criado. Guardo conmigo tantos recuerdos, cómo estar todos en la
orilla del mar tomando mate y disfrutando del atardecer. Como dije antes,
Necochea para mí, es un conectar con mi familia. Es un lugar donde me relajo y
disfruto. Quizás a veces me pasa que extraño Capital pero intento disfrutar de
estar en familia, porque es algo de las
cosas más importantes que tengo, en especial mi abuela Beti. Mujer que me crió
tanto como mi mamá y papá. Una de las personas que más admiro, por su dulzura y
su predisposición a todo. Es como un ejemplo a seguir, ella siempre deja sus
problemas de lado para ayudar al otro y creo que eso lo heredé un poco de ella.
Volviendo
a mi vida en Capital Federal, donde nací y actualmente vivo. Capital es como mi
otro mundo, en relación con Necochea. Es el mundo del alboroto, el de miles y
miles de actividades y el de compartir momentos con amigos. Yo, María Mc
Cluskey, soy una persona que disfruta mucho de los momentos. Me gusta estar
rodeada de la gente que quiero, me considero sociable, divertida, cariñosa y sobre
todas las cosas, sensible. Soy una chica con mucha energía cuando se trata de
hacer algún deporte, considero que se me da muy bien y a su vez soy un tanto artística.
Y aquí vienen mis dos otros mundos en los que me divido.
El
primero, en el que siempre me marcó, es el de la música. Vengo de una familia artística
por parte de mi papa. Mi abuelo tuvo una banda llamada los Mac Ke Mac´s.
Digamos que mi padre me inculcó el amor por la música, crecí bailando y
cantando cada uno de esos temas, sumados también a las canciones de mi tío
abuelo Donald Mc Cluskey, que muchos deben conocer. Allí creció mi pasión por
la música. No hay momento del día que no me encuentre cantando o escuchando alguna
canción. Mi Mundo artístico, el de la música, lo relaciono siempre con mi papa,
porque es aquel que me lo enseño. En el día de hoy canto e intento aprender
guitarra y sueño con tener algún día mi propia banda.
El
segundo mundo, el del deporte. Este mundo también me atraviesa todos los días de
mi vida. Siempre desde chiquita me gusto hacer cualquier tipo de actividad física
hasta que a los 9 años entre en el club Geba para jugar al Hockey. Hoy, se convirtió
en una de mis grandes pasiones. No podría pensar mi vida sin el hockey. No
tengo recuerdo de un martes, jueves o sábado sin tener hockey. Y quizás muchas
veces me he lamentado por tener este compromiso, por el hecho de perderme
alguna juntada o fiesta. Pero no hay día que me arrepienta de seguir eligiendo
el hockey. Este deporte me enseñó muchas cosas, una de las más importantes el
compromiso. No voy a negar que me haya costado varias veces esfuerzo y
sacrificio pero cuando uno se compromete con algo, no puede simplemente
dejarlo. Aprendí que por más que cueste hay que hacer todo lo posible para
llevar hasta el final, hasta el objetivo. Porque luego de todo ese sacrificio,
de todas las horas entrenando, no hay alegría más grande que uno pueda sentir
cuando lo cumplís. Mi
hermano mayor, Gerónimo, es alguien que también me ha enseñado mucho sobre el
deporte, por sobretodo porque siempre fui su juguetito para hacer cualquier
tipo de actividad. Creo que luego de tantas veces que me amagó con la pelota aprendí
a jugar bien al fútbol. Mi vida es un poco como un partido, no siempre se gana,
a veces se pierde o incluso empata. A veces no se rinde bien y hay veces que
destacamos y hasta uno mismo se sorprende. Creo que es cuestión de vivir cada
momento y siempre verlo como un aprendizaje más. Este mundo lo relaciono con mi
mama, sin ella nunca podría haber llegado hasta hoy. Siempre llevándome y trayéndome
del club, siempre yéndome a ver a cada partido aunque hasta el día de hoy no
entienda mucho el deporte.
Si llegaron hasta acá, verán que mi vida se divide en dos, por un lado con mi padre y la música y por otro lado con mi madre y el deporte. Y como dije desde un principio no puedo vivir sin ninguna de las dos, ni anteponer una sobre la otra. Yo creo que si es posible amar doble. Cada mundo me genera hermosos sentimientos que son tan distintos a la vez. No digo que sea fácil estar siempre en el medio pero lo intento hacer de la manera más positiva y divertida posible.
Si llegaron hasta acá, verán que mi vida se divide en dos, por un lado con mi padre y la música y por otro lado con mi madre y el deporte. Y como dije desde un principio no puedo vivir sin ninguna de las dos, ni anteponer una sobre la otra. Yo creo que si es posible amar doble. Cada mundo me genera hermosos sentimientos que son tan distintos a la vez. No digo que sea fácil estar siempre en el medio pero lo intento hacer de la manera más positiva y divertida posible.
Soy
María Mc Cluskey y tengo 18 años, estudio Comunicación social en la Universidad
de Buenos Aires y me queda mucho por vivir y mucho por recorrer en estos dos
mundos que vivo. ¿Quién dice que no descubra un tercer mundo, una tercera pasión,
una tercera persona? Quizás este camino me lo mostrara.
Hola! Me gustó como escribiste tu autobiografía a partir de esa idea de los dos mundos, me copa como le da una estructura y sentido al relato.
ResponderBorrarOjalá que este nuevo comienzo en la facultad te abra un tercer mundo, o te re-conecte a uno de los dos mundos en los que ya vivís desde otra perspectiva. No se, te imaginas pudiendo combinar la comunicación con la música y el deporte?
Por otro lado cuando decís "Yo creo que si es posible amar doble" me gusta porque lo tomo como que estas desafiando a la idea de que solo se puede amar una cosa a la vez, y a su vez me hace pensar en la idea del amor monogamico que hoy en dia es un tema de gran cuestionamiento. Te pueden gustar dos o mas cosas a la vez y eso esta genial.
Por otra parte, nos parecemos en el lado de la música: a mi también me encanta cantar y toco la guitarra, y también tengo un músico en mi familia, mi papá. Además también anhelo formar mi propia banda (te lo podes tomar como una indirecta jajaja).
Bueno muy lindo escrito, este fue mi pequeño comentario. Besosss